Tan solo cuatro años después de que Karl Benz patentara el primer vehículo de la historia con motor de combustión interna, el empresario Francesc Bonet Dalmau sacó a pasear por las calles Barcelona el automóvil que había construido en las instalaciones de su fábrica textil. Más allá de iniciativas incipientes como la de Bonet, cabe considerar, pero, que la mayoría de los vehículos que circularon por España a principios del siglo XX eran de importación.
Fuente: www.interempresas.net 16-07-2019